Cuando ya tenemos un niño, que todavía es pequeño, y le anunciamos que pronto va a tener un hermanito las reacciones pueden ser muy variadas. Pero hoy, vamos a hablar de cómo conseguir que un niño o una niña acepte la llegada de un nuevo hermanito cuando la noticia no le ha gustado demasiado.
No os preocupéis, que tiene solución. Es muy normal que se den regresiones en nuestros hijos, se vuelva a hacer pis en la cama, celos y traten de llamar mucho la atención. Es su manera de decirnos que todavía son pequeños y que nos necesitan tanto o más que le nuevo bebé que viene.
1. No pases todo el día hablando del nuevo bebé
Obviamente, para que el niño se haga a la idea, es necesario hablarle del bebé, de la nueva situación que va a haber en casa, cómo le va a afectar. Pero no debemos pasar todo el día hablando del bebé.
Es muy importante que dediquemos tiempo, el mayor que podamos, a hablar de otros temas: los planes para el fin de semana, cómo ha ido el día, qué película quiere ver esa noche, a qué juego jugaréis antes de irse a dormir, etc.
2. Involucra al niño en la preparación de la llegada
Esta parte es muy importante. Claro que se van a producir cambios en casa, pero lo mejor es que el niño colabore en ellos, hacerle sentir como parte importante de todo lo que se avecina. Debe sentir que su opinión, sus consejos y su ayuda es fundamental en la familia. Que te ayude a elegir los colores de la habitación, que él mismo prepare dibujos y detalles para el nuevo niño.
3. Dedicarle un tiempo exclusivo
Cada día debes dedicarle un buen rato a tu hijo o hija. Que sienta que no han cambiado tanto las cosas después del nacimiento de su hermano o durante el embarazo. En todo momento debe percibir que los padres siguen teniendo mucho tiempo para él, para jugar, divertirse, hacer los deberes, etc.
4. Explicarle su misión como hermano mayor
Ahora, él o ella se va a convertir en el hermano o la hermana mayor. Por tanto le explicaremos qué misiones va a tener, qué privilegios tendrá como hermano mayor, etc. Debe sentir que va a tener un papel muy importante en la vida de ese nuevo hermano.
5. Dedicad unos minutos a hablar con el bebé
Antes de que el bebé nazca, todas las noches, túmbate junto a tu hijo en su cama y hablad un rato con el bebé, cantadle, que tu hijo apoye su cabeza en tu tripa. Contadle todo lo que habéis hecho ese día por él, qué cosas va a enseñarle su hermano mayor, a qué jugarán, etc.
6. Hablar de cuando él o ella era pequeño
Podemos hablar de cuando él o ella eran pequeños, revisar las fotos, contar anécdotas, trastadas, etc. Una idea estupenda es preparar entre todos el nuevo álbum del bebé o un álbum de los hermanos. El niño podría decorarlo como quisiera utilizando los dedos, pinturas, recortes, etc. Lo que buscamos es que, aunque haya celos, poco a poco aparezca la ilusión.
7. Habla con el resto de la familia
Es muy recomendable comentar al resto de la familia la situación de nuestro hijo. Por ello les pediremos que, cuando lleguen a casa a visitar a la futura mamá o cuando el bebé ya haya nacido, dediquen también un tiempo a jugar con el hermano mayor. Incluso, aunque sea solo al principio, que también le lleven un detalle. Tenemos que intentar que el niño no sienta que le hemos olvidado. Sabemos que esto nunca va a pasar, pero el niño debe experimentarlo.
¿Cómo llevaron vuestros hijos la llegada de su hermano? ¿Qué trucos empleasteis para que aceptaran a su nuevo hermano? ¿Tuvieron celos? ¿Cómo os sentíais vosotros?

ESCRITO POR Maite Gil
Autora del blog Creative Mindly y multiplicadora de horas. Me encanta la decoración, el diseño y las buenas ideas.