Antes del verano es cuando más nos preocupamos por nuestro aspecto y por lo general nos cuidamos más, pero…¿qué pasa cuando llegan el frío y la lluvia? Es cierto que da más pereza, pero por supuesto nunca es tarde ni hay excusas para no empezar a cuidarse.
Más allá de recomendaros cremas y productos concretos, hoy queremos contaros 8 mandamientos básicos que todas deberíamos incluir en nuestra rutina y que nos ayudarán a vernos y sentirnos mejor.

1. Limpieza, limpieza y limpieza
Dice el refrán que “la limpieza es media belleza”, y en el caso del cuidado facial no podría ser más cierto. De nada sirve invertir en buenos productos y seguir una rutina estricta si no partimos de una buena base. Limpiar la piel mañana y noche es fundamental, y ahora lo tenemos más fácil que nunca, ya que existen todo tipo de formatos y seguro que encontramos el que más se adapte a nuestras necesidades y gustos.
Eso sí, siempre con moderación. La piel tiene su propia “capa” protectora y si no hacemos más que exfoliar y limpiar podríamos conseguir el efecto contrario.
2. Nunca te acuestes sin haberte desmaquillado
Podría formar parte del punto 1, pero aquí hablamos específicamente de las noches post-fiesta. Pensar en desmaquillarse a las tantas de la mañana cuando lo único que quieres es apoyar la cabecita en la almohada no es fácil. Pero créeme, tu piel te lo agradecerá. Aunque no sea lo ideal, más vale una toallita desmaquillante que nada. Tu piel respirará y a la mañana siguiente te ahorrarás el disgusto de levantarte con algún que otro granito. Lo de la resaca ya es otro tema…
3. Protección solar
Si hay algo tan importante como la limpieza, es proteger la piel del rostro de los rayos solares. Dicen que es la mejor crema anti-arrugas que hay pero, ¡ojo!, esto no significa que tengamos que ir escondidas en cuanto veamos un rayito de sol, sino encontrar una crema con protección que se adapte a nuestros gustos y usarla todos los días. Todos, no sólo en verano.
4. Escucha a tu piel
Muchas veces pecamos de no darle a la piel lo que necesita y simplemente nos guiamos por lo que haya ido bien a una amiga, a nuestra madre e incluso tomamos una decisión basándonos en la publicidad. Hay tantas pieles como personas, por eso fíjate en lo que te dice la tuya. ¿Tiene zonas secas o tirantes? ¿Genera grasa? Observa y dale lo que necesita en cada momento.
5. ¡Cuidado con esas manos!
No es nada recomendable (aunque sea una de las tentaciones más grandes que existen) toquetearse los granos. Lo más probable es que no arregles nada o que incluso lo empeores. Tampoco ayuda estar constantemente echándonos las manos a la cara. Y, si no, piensa en todo lo que pasa por nuestras manos a lo largo del día… Poco higiénico ¿verdad?
6. ¿En qué invertir?
En caso de duda, mi recomendación es un sérum. Tienen una capacidad de penetración más grande que las cremas y pueden proporcionarnos todo lo que necesitamos, ya sea hidratación, cuidados anti-edad, tratamiento de las manchas, etc. Un buen sérum siempre será una buena inversión.
7. ¿Piel problemática? Acude al especialista
Puede ser que sigamos todos estos pasos, que tratemos con todos los mimos del mundo a nuestra piel y aún así ésta no tenga el aspecto que queremos. Puede ser una simple racha o que haya un problema de fondo. Por eso, en casos de afecciones graves debemos de acudir al especialista.
8. Cuídate y sé feliz
Suena a tópico pero no hay que olvidar que la piel refleja lo que pasa en el interior del organismo. Si estás pasando por una época de estrés, problemas en el trabajo o una mala relación, llevas una mala alimentación, etc, el cuerpo lo reflejará. No te olvides de que lo más importante es nuestra salud e intenta llevar las cosas de la mejor manera posible y cuidarte. Si estás feliz y llevas una vida sana tu piel lo transmitirá.
¿Qué os parecen estos consejos? ¿Los seguís? ¿Cuáles son vuestros mandamientos a la hora de cuidar la piel del rostro?