Cuando nos vemos inmersos en una rutina, es fácil que se nos pasen los días rápido, y sin darnos cuenta no llegamos a disfrutarlos. Sólo deseamos que llegue el fin de semana y vuelta a empezar. Pero esto no es nada motivador, tenemos que hacer que los días cuenten y que en todos ellos haya algo especial. La mayoría de las veces nos levantamos y actuamos rutinariamente. ¿Qué tal un poco de motivación extra? ¡Aquí van algunos consejos!
1. Asómate a la ventana
Cuando por la mañana te suela la alarma, ¿qué haces? ¿Mirar el móvil? Mejor no lo hagas. Abre las ventanas, deja que entre el sol y que se despierten tus sentidos poco a poco. Que el smartphone sea lo primero con lo que estés en contacto al despertar solo te creará más estrés. Mensajes acumulados, Whatsapps, noticias trágicas, obligaciones… ¡Stop! No estamos preparados para recibir tanta información.
2. Disfruta de un buen desayuno
Nada de un café rápido o, peor aún, ¡irse sin desayunar! Aunque esto suponga levantarse 20 minutos antes lo mejor es prepararse un buen desayuno con calma. Cereales, tostadas, fruta… será el momento perfecto para ordenar tu mente y afrontar el día sin salir corriendo. Disfruta del desayuno y despeja tu mente meditando, escuchando música o leyendo una revista tal vez.
3. Planifica tu día
A veces se nos acumulan las cosas que hacer y al levantarnos nos encontramos con todo el caos diario ¡Pero hay solución! Dedica 10 minutos a organizarte y verás todo mucho más claro. Haz una ‘to do list’ del día separando las tareas más importantes de las más urgentes y elige qué momentos vas a dedicar a cada una de las tareas. Con organización se ve todo mucho más claro ¡y serás mucho más productiva!
4. Mira tu ‘panel de motivación’
Creo que todo el mundo debería tener un panel de motivación. ¿Qué es esto? Simplemente una zona en tu casa o habitación (corcho, pizarra magnética o similar) con pequeños recordatorios de las cosas que quieres conseguir a largo plazo y que puedas leer o ver cada día para así tenerlos muy presentes. Pueden ser en forma de imágenes, frases que te inspiren, tus valores, tus objetivos o lo que tú quieras. Cosas que necesites recordar cada día y que te den el empujón que necesitas.
5. Proponte un pequeño reto
La posibilidad de realizarlo hará que el día tenga más sentido. Intenta que no acabe ese día sin haberlo cumplido. No hace falta decir que ese reto estará relacionado con tus metas y objetivos a largo plazo, ¿no?. Paso a paso se consiguen los grandes logros, y el hecho de haberlo conseguido dará un punto de gratificación a tu día.
6. Arréglate con música de fondo
Tómate tu tiempo para arreglarte, ¡y nada de ponerte lo primero que veas en el armario! Si quieres que el día que se te presenta sea único, tienes que ir mentalizada física y psicológicamente. Mientras te arreglas, la música te ayudará a relajarte y a ir llenando el día de positividad. Se trata de aportar un punto extra a los pequeños detalles cotidianos. ¡Notarás la diferencia!
7. Elige tu actitud antes de salir de casa
Aquí solo hay una opción posible. Antes de salir solemos revisar que no nos olvidamos nada. Bolso, llaves, abrigo, ok ¿Y qué hay de la actitud? También deberíamos tenerla en cuenta, porque tal vez sea una de las cosas más importantes, ya que nos acompañará durante todo el día y determinará la manera de afrontarlo. Mentalízate y hazte con una actitud positiva. Ahora ya, ¡toca empezar a vivir el día!
¿Vosotras qué hacéis para empezar bien el día? ¿Hay algo que consideres imprescindible? ¿Qué añadirías a la lista?

ESCRITO POR Ester Mateos
No soy colaboradora habitual del blog pero hoy he querido compartir esto con vosotras. Si vosotras también queréis escribir en Coral Avenue leed esto 🙂

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No soy colaboradora habitual del blog pero hoy he querido compartir esto con vosotras. Si vosotras también queréis escribir en Coral Avenue leed esto 🙂