En lo que a los hombres se refiere, conseguiremos mucho más de ellos si decimos las cosas de manera que no se sientan atacados. Por eso hay que evitar decir ciertas frases y formularlas de otra forma para llevar las cosas a nuestro terreno y evitar que ellos se atrincheren.
1. Estoy hasta las narices de hacerlo yo todo en esta casa
Para un hombre que se desentiende de las tareas del hogar, esta frase es absolutamente contraproducente. Mucho mejor algo como: «Me gustaría que me ayudaras a quitar la mesa de vez en cuando«.
2. No me cuentas nada
En lugar de reprocharle su mutismo, es preferible empezar conversaciones en temas que le interesen e ir llevándolo después al terreno que nos interesa a nosotras.
3. Has estado fatal
En materia de sexualidad, hay que evitar siempre expresar nuestra insatisfacción o impaciencia descalificando al otro. Frases como «no ha estado tan bien como otras veces» o «nos está costando un poco últimamente hacer que yo quede satisfecha» tienen la virtud de llevar la situación hacia un problema de pareja y no sólo de él.
4. Te he puesto los cuernos
Si esta traición es debida a una frustración o insatisfacción, es mejor expresarla como tal con palabras, en lugar de confesar una infidelidad pasajera que hará sufrir al otro, sobre todo si la pareja vuelve a funcionar bien.
5. No me sacas nunca
Los hombre reaccionan mejor a frases que proyectan una buena imagen de ellos. Por eso prueba algo como «Me gustaría que saliéramos un poco. A ti siempre se te ocurren buenos sitios donde ir»
6. ¿Me quieres?
Sobre todo si no estás preparada para obtener un no por respuesta. Dí mejor «te quiero«, tendrás más probabilidades de que la respuesta sea gratificante: «Yo también, ya lo sabes».
7. Has engordado un poco…
Porque esto le joroba a cualquiera, y ellos también tienen su corazoncito. Mejor proponle que te ayude a ponerte a dieta haciéndola contigo («Entre dos siempre es más fácil») o salir a correr juntos un par de veces por semana.
¿Hay algo que tu chico odie que le digas? ¿Cómo haces para decirle cosas que no le gusten sin que se rebele? ¿Tienes algún truco para que no se lo tome a mal?

ESCRITO POR Macarena Pavlovic
Bloguera repostera en el blog Bajo un nube de azúcar glas y madre de 3 niños, soy una apasionada de la moda, la belleza y el diseño gráfico.